PROYECTO WEFOREST BRASIL
El Bosque Atlántico, está entre los cinco principales puntos de biodiversidad del mundo. Los árboles se plantan con el propósito de repoblar las parcelas de bosques que quedan y hacer crecer nuevos corredores forestales, y así hacer más espacio para que la vida silvestre prospere y se reproduzca. Animales como el tamarín león negro, los ocelotes, los osos hormigueros e incluso los pumas han regresado a la zona. La restauración del Bosque Atlántico también es de gran importancia para el clima, ya que el bosque de segundo crecimiento tiene un gran potencial para el almacenamiento de carbono. En la Ley Forestal Brasileña, cada propietario de tierras está obligado a registrar un mínimo del 20% de las tierras rurales como bosque permanente, lo que significa que los árboles allí plantados estarán protegidos. Los plantones de árboles se cultivan en viveros comunitarios dirigidos por mujeres locales, mientras que los miembros del Movimiento de Trabajadores Sin Tierra de Brasil plantan los árboles. De esta manera no sólo ayudan a restaurar el Bosque Atlántico, sino que también aprenden valiosas habilidades y se ganan la vida.